Buenos Aires, 07/09/2012
Amparos de SOS Caballito y Basta de Demoler:
LA JUSTICIA FRENA 3 TORRES DE IRSA EN CABALLITO
La Sala I de la Cámara de Apelaciones en lo Contencioso, Administrativo y Tributario de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires dictó una medida cautelar por la cual ordenó suspender la construcción de tres torres que la empresa IRSA pretendía edificar en la manzana correspondiente a las calles Rojas, F. Vallese, Colpayo y Méndez de Andes (Rojas 629/31/33/35/37/39/41/77), del barrio de Caballito Norte, hasta tanto se dicte la sentencia definitiva.
La decisión judicial fue resuelta en el marco de dos amparos presentados por las organizaciones vecinales SOS Caballito, con el patrocinio de los Dres. Hernán Petrelli y Paula Vassallo; y Basta de Demoler, con el patrocinio de los Dres. Jonatan Baldiviezo, Sebastián Pilo y Enrique Viale.
Para así resolver, el Tribunal (compuesto por los jueces Carlos Balbín, Horacio Corti e Inés Weinberg de Roca) cuestionó el modo en que el Gobierno de la Ciudad oportunamente otorgó el permiso de obra en cuestión, dilatando mediante el veto la puesta en vigencia de la Ley sancionada por la Legislatura de la Ciudad que impedía dichas construcciones, y valiéndose de dicha dilación para autorizar la construcción de las torres. Asimismo, hizo hincapié en el estado de abandono en que la empresa constructora mantuvo las obras durante casi tres años, a pesar del cambio de normativa urbanística que se había producido a partir de la puesta en vigencia de la Ley Nº 2.722; y cuestionó la falta de realización de obras imprescindibles para la adecuada provisión de servicios públicos al barrio, específicamente las que deberían garantizar que no se afecte el caudal de agua en la zona.
Al respecto, los miembros de SOS Caballito sostuvieron: «Este es un logro de tantos años de lucha de los/as vecinos/as de Caballito. Esas torres iban a a generar un gran daño ambiental, violentaban la identidad y la tipología barrial, violaban la Ley que conseguimos los/as vecinos/as, y afectaban los servicios públicos y nuestra calidad de vida. En el lugar se están edificando tres torres de 70, 80 y 90 metros de altura, con las características de un barrio privado. Derrotamos a una de las obras más grandes de la Ciudad, a cargo de una empresa con demasiado poder económico e influencia. Contra el siniestro accionar de especuladores inmobiliarios y funcionarios cómplices, seguiremos defendiendo nuestra calidad de vida«.
Asimismo, desde Basta de Demoler manifestaron: «La construcción indiscriminada es la contracara de la demolición indiscriminada. Esta decisión judicial pone las cosas en su lugar, dejando en claro que por más poder e influencia que tenga una empresa constructora, todos nos tenemos que atener por igual a las leyes» y agregaron: «El GCABA se niega a modificar la situación de los contínuos conflictos urbanísticos, ya que desde que surge esta problemática, no se discuten soluciones de fondo (el CPU). No hay cambios que contemplen los reclamos vecinales; por el contrario, la inacción del GCABA muestra la voluntad de seguir favoreciendo intereses privados en contra del bien común de la ciudad y sus habitantes».
Finalmente, los abogados que patrocinaron a ambas organizaciones sostuvieron: «Este fallo será un antecedente importantísimo en materia de derecho urbano-ambiental en la Ciudad de Buenos Aires y en el país. El Tribunal dictó una sentencia ejemplar que prioriza el derecho constitucional a un ambiente sano y a un hábitat adecuado de quienes vivimos en la Ciudad, por sobre los intereses económicos de grupos determinados. La planificación urbanística de la ciudad no puede quedar en manos de la especulación inmobiliaria, sino que es una obligación estatal que los/as funcionarios/as públicos no pueden dejar de ejercer«.