Mientras se ganaba esta batalla para limitar el entusiasmo de Santilli en Palermo, se ganaba otra en la Comuna 7, la de Parque Chacabuco y Flores, que podrá enfriárselo en las maltratadas calles del barrio. El viernes de la semana pasada, el juez Pablo Mántaras aprobó un amparo para que se frenen los asfaltados de la zona y se repare el daño causado, “dejando la calzada en el mismo estado que se encontraba antes de la obra”. En este caso, se trata del simple retiro de las piedras y reasfaltado, o de una capa del material encima de las piedras.
Las calles atacadas son Avelino Díaz y José María Moreno del 300 al 800, y Viel, Albarracín y Beauchef del 1500 al 1600. Las cuadras de Senillosa al 1600, Doblas al 1500 y 1600, y Francisco Bilbao entre el 1300 y el 2000 ya vieron sus piedras arrancadas, con lo que los vecinos pedían que las restauren. Mántaras concedió la precautelar en las calles mencionadas y le ordena a Santilli que le remita las resoluciones relevantes.
Lograr esto no fue fácil. Desde la Comisión de Cultura y Patrimonio de la comuna se hizo fuerza –en especial Susana González– mientras que los vecinos Jorge Cuello y Carolina Tafuri se presentaron como amparistas. Cristina Sottile estudió y escribió y el abogado Ramiro Dos Santos Freire impulsó la causa.
Que sólo puede criticarse por escasa: este martes, la firma Rovella Carranza SA repartió papelitos avisando que seguía asfaltando en Avelino Díaz al 900, la cuadra siguiente al amparo. Los papelitos eran para que los vecinos sacaran los autos.