«Los vecinos de Tribunales también festejan. Esta vez se trata de la cautelar que acaba de conceder la Justicia frenando el bodrio espectacular que quieren construir sobre el convento de Las Victorias, en la esquina de Paraguay y Libertad. El proyecto es una expresión de libro del modelo especulativo inmobiliario, con todas las picardías. El convento está municipalmente formado por dos edificios diferentes, la pequeña capilla sobre Libertad y el convento en sí, que llega a la esquina y da la vuelta unos metros por Paraguay. El conjunto está catalogado con el grado más alto posible, pero los compradores interpretaron con ingenio avenegra que la capilla no está incluida.
Esto, dicen ellos, permite demolerla y alzar ahí una torre en el estilo International Mediocre, tan a la moda. Como ni ellos pueden interpretar que pueden demoler el convento, piensan vaciarlo, calarlo de columnas y hacerle a la torre una “L” invertida que se proyecte por encima del edificio. Los dibujos del proyecto dan escalofríos…
La Justicia acaba de frenar los trabajos, que iban bien apuraditos. Habrá que ver si al fin tenemos un castigo para los vándalos, porque el edificio ya fue vaciado –se vendieron sus muebles y arte para hacer trabajo misionario ¡en Mozambique!– y martillado por adentro, aunque la protección de la catalogación lo prohíbe.»