El futuro del patrimonio de la ciudad está en sus manos:
Uno de los principales mecanismos de protección del patrimonio está a punto de caducar
El 31 de diciembre venidero pierde vigencia la Ley 2548 y su prórroga 3680, Ley de Régimen de Promoción Especial de Protección Patrimonial, único mecanismo de protección para los edificios que datan de antes de 1941. Esta ley fue prorrogada en dos oportunidades para dar tiempo a que el GCBA realizara el relevamiento de todos los barrios de la ciudad y tuviera así la posibilidad de completar el catálogo de edificios protegidos. Pero esto no se concretó aún.
Cuando esta ley pierda vigencia sólo quedaran protegidas de la piqueta las escasas construcciones catalogadas que existen en la ciudad. En consecuencia, todo edificio, aunque tenga valor patrimonial, será considerado como terreno vacante por los intereses inmobiliarios, ya que estará habilitada su demolición.
Esto permitirá que se sigan destruyendo nuestros barrios, perdiendo su identidad y alterando aún más su calidad de vida.
Acompáñenos nuevamente enviando una carta a los legisladores solicitando la prórroga de la Ley 2548/3680, hasta tanto se complete la catalogación del patrimonio arquitectónico de toda la ciudad
PARA ENVIAR LA CARTA FACILMENTE HAGA CLICK AQUÍ
Buenos Aires, 9 de noviembre de 2010.
Sr. Legislador de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires
Dip.
S/D
La caducidad de la ley 2548 y su modificatoria la Ley 3056, se puede contar en horas. Las contamos los que sostenemos como se dice en los fundamentos de la ley que:
“Su patrimonio arquitectónico, urbano y paisajístico constituye un recurso único, excepcional y no renovable que no sólo es un componente crucial de la memoria e identidad de la ciudad y de sus habitantes sino también un factor de atracción turística primordial y de desarrollo económico de la ciudad.”
También cuentan las horas los especuladores, los creadores de fondos fiduciarios, las inmobiliarias que aconsejan esperar un poco más porque en enero ya se podrá demoler indiscriminadamente.
Como Legislador esta en sus manos que se cumpla el mandato constitucional que exige proteger nuestro patrimonio, arts 26, 27 y 32 CCABA y para que se mantenga:
“… una herramienta que permita evaluar el significado patrimonial de los edificios a fin de decidir si su conservación es valiosa para la ciudad.”
Que esa decisión no la tomen unos pocos pero poderosos grupos de interesados en los negocios rápidos que se disponen a borrar para siempre los bienes que nos pertenecen a todos.
La Legislatura que debe representarnos, es la que tiene que actuar en las horas que quedan, reconociendo que la emergencia que dio origen a esta ley, es hoy un peligro inminente que puede en parte evitarse con la prorroga de la ley.
Nosotros apoyamos, de usted depende.
Información adicional
¿Qué puede pasar si la ley no se prorroga? Míralo en este video
(con textos de «La Casa» de Manuel Mujica Láinez)
¿Qué tipo de protección existe actualmente?
¿Qué tipo de protección existe actualmente?
En materia de patrimonio, la ciudad está bajo el amparo de la Ley 2548/ 3680 (Ley de Régimen de Promoción Especial de Protección Patrimonial) hasta el 31 de diciembre de 2011. Dicha ley establece un mecanismo que obliga, previo a la demolición o modificación de una propiedad construida antes del 31 de diciembre de 1941, se demuestre que carece de valor patrimonial. Si el bien carece de valor el permiso correspondiente es obtenido. Si la propiedad en cuestión se considera patrimonialmente valiosa se procederá al inicio de su catalogación ante la Legislatura, impidiéndose la demolición.
El organismo encargado de determinar el valor de los edificios de la ciudad es la Dirección General de Interpretación Urbanística, dependiente de la Subsecretaría de Planeamiento del Ministerio de Desarrollo Urbano, a través del Consejo Asesor de Asuntos Patrimoniales (CAAP). Este consejo está conformado por miembros del Poder Ejecutivo y del Poder Legislativo de la Ciudad, así como de instituciones vinculadas a la disciplina arquitectónica, urbanística y patrimonial. El CAAP trata cada caso en particular y recomienda si el edificio se demuele o se protege.